
Con una participación de alrededor de 2.000 jóvenes de colegios salesianos de todo el país, junto a delegaciones internacionales provenientes de Bolivia, Argentina, Colombia, Paraguay, y los colegios de las Hijas de María Auxiliadora de Chile, el evento fue un verdadero testimonio de la fraternidad y el compromiso juvenil que caracteriza a los discípulos de Don Bosco.
El objetivo principal de Campo Bosco fue crear una experiencia de vida auténtica y comprometida, en la que los jóvenes pudieran reflexionar y compartir sobre el protagonismo social y comunitario que debemos asumir como futuros líderes de una sociedad más justa, fraterna y solidaria, todo esto desde la inspiración del carisma salesiano.
En este contexto, el P. Nelson Moreno, Inspector de los Salesianos en Chile, dirigió un emotivo mensaje a los jóvenes presentes durante la bienvenida: “Somos uno de los movimientos juveniles pastorales más grandes de Chile y nuestra sociedad necesita jóvenes comprometidos que vivan grandes sueños. Chile necesita de los salesianos y de ustedes, ¡que siga este espíritu vivo!”
Al respecto, Alfredo Araneda, catequista de confirmación y uno de los participantes, comentó: "Campo Bosco es una experiencia que no se ve en cualquier lugar. Es un momento de reflexión, encuentro y diversión. El poder convivir con gente de distintas partes de Chile es algo muy especial que hace inolvidables los momentos que compartimos".
Durante los intensos días de actividades, los jóvenes disfrutaron de momentos de reflexión, juegos y dinámicas grupales que reforzaron su sentido de comunidad y compromiso. La carpa central, donde se realizaban encuentros masivos, se convirtió en un espacio de unión donde todos los jóvenes podían interactuar y disfrutar de la compañía mutua.
El área de evangelización del Centro Educativo Salesianos Alameda agradece profundamente el apoyo de la Dirección del colegio, el personal administrativo, el Centro de Padres y Apoderados, y todos los educadores que colaboraron en la preparación y acompañamiento de nuestra delegación. Sin su esfuerzo y dedicación, este importante evento no habría sido posible.
¡Que el espíritu salesiano siga vivo en cada uno de nosotros!