Con gran pesar y una profunda muestra de cariño y respeto, la comunidad educativa del Colegio Salesianos Alameda se despidió de la profesora Mónica Angélica Canales Velásquez, quien falleció el pasado domingo 1 de diciembre. Las exequias se realizaron en el Templo del Santuario de María Auxiliadora, siendo presididas por el Padre Director Víctor Mora SDB, y convocando a una multitud de docentes, estudiantes, apoderados, ex estudiantes, ex profesores y familiares.

Durante la ceremonia, se recordó a la profesora Mónica como un claro ejemplo de vida cristiana y entrega incondicional. El Padre Víctor, al referirse a su legado, destacó que Mónica apostaba todo por la formación integral de sus estudiantes, confiando en que su trabajo daría frutos que, como bien señala el evangelio, perdurarían en el tiempo. "Ella debe estar orgullosa del cariño recibido por la gran cantidad de ex alumnos que hoy han venido a despedirla", afirmó el Padre, reconociendo el impacto de su vocación en cada uno de quienes la conocieron.

Mónica fue descrita como una persona cuya entrega no esperaba recompensa, lo que hizo de ella una mujer admirable. "Sus enojos, sus chistes, sus alegrías, hoy cobran sentido en la medida que damos gracias a Dios por ella, porque Mónica vive en Él", expresó el Padre Víctor, conmovido por la magnitud del legado dejado por la profesora.

El homenaje también contó con palabras emotivas de parte de la familia de Mónica, quienes destacaron que ahora entienden la alegría con la que Mónica siempre se encontraba en el colegio. "Ella estaba aquí porque se sentía respetada, valorada y amada por sus colegas y estudiantes", señalaron, rememorando su vocación desde pequeña, siempre alegre y servicial.

El funeral continuó con la presencia de la comunidad educativa y de la familia de Mónica, quienes acompañaron sus restos hasta su descanso final en el cementerio Metropolitano, rindiendo un último homenaje a una mujer que dedicó su vida al servicio y bienestar de los demás.

Que su legado de amor, fe y entrega continúe vivo en todos quienes tuvieron el privilegio de conocerla.